Desde sus orígenes pixelados hasta las experiencias inmersivas contemporáneas, esta exposición traza el recorrido histórico del género de disparos en primera persona (First-Person Shooter), uno de los más influyentes y populares en la historia de los videojuegos.
El viaje comienza con Wolfenstein 3D y Doom, pioneros que sentaron las bases técnicas y estéticas del género durante los años 90. Se exploran luego las innovaciones de Quake, la consolidación del multijugador competitivo con Counter-Strike, y el impacto narrativo y técnico de títulos como Half-Life, que elevó los estándares de la narrativa interactiva.
También se examina cómo Halo llevó los FPS a las consolas y redefinió el control en mando, o cómo Call of Duty y Battlefield moldearon el género con realismo bélico, mientras que juegos como Overwatch y Apex Legends mezclaron el FPS con dinámicas de juego en equipo y elementos de héroes o battle royale.
La exposición no solo sigue el avance gráfico y tecnológico —como el uso de motores 3D, inteligencia artificial y realidad virtual—, sino también la evolución de las dinámicas de juego, la representación de la violencia, el papel del jugador y la construcción de mundos inmersivos. Una mirada crítica y celebratoria a un género que no deja de reinventarse y de marcar el pulso de la industria.